Creo que ya se ha dicho en alguna de las cinco o seis páginas del hilo, y si lo repito pido disculpas, pero desde mi punto de vista hay otro argumento demoledor y que no mucha gente está dispuesta a reconocer: si en RS tuviésemos las rutas españolas y el material "renfero" que tenemos en MSTS, es muy probable que este debate no existiese.
Es evidente que no es tarea fácil convertir el material de MSTS a RS, aunque, como se demostró en las Jornadas de Alicante, tampoco es tan complicado para aquellos que lo saben hacer (para mí, que soy muy torpe en esto, lo sigue siendo
). Otro cantar son las rutas; ahí si que no queda más remedio que "volver a tirar vía" porque, mientras no aparezca una piedra filosofal que demuestre lo contrario, no se pueden convertir las rutas de un simulador a otro.
Por esto, RS está comenzando igual que comenzó MSTS: en pañales. ¿Quien se acuerda de las rutas originales de MSTS? Si no fuera porque son necesarias para las demás rutas, estoy convencido de que la inmensa mayoría las habría desinstalado ya, para dejar espacio en su disco duro a otras rutas, ciertamente mucho mejores. ¿Y del material original? ¿Alguien sigue utilizándolo? Al igual que las rutas originales, si no fuese porque es necesario para otro material, ya lo habríamos desinstalado. El punto de inflexión de MSTS llegó con la publicación de las primeras rutas españolas o españolizadas y con la creación de material "renfero". ¡Ah! y creo que no hay que olvidar que MSTS también dió muchos problemas de inicio, que obligaron a Microsoft a la publicación de parches para solucionar varios problemas. Igual que sucede ahora con RS. Entonces no pasó nada y ahora tampoco debería. Claro que la gran diferencia entonces era que no existía ningún simulador de esas características y sólo tocaba "tragar"; hoy en día hay varias opciones en el mercado, algunas muy asentadas y con mucho material, y parece que asustan las novedades; algunos se "rasgan las vestiduras" cuando la nueva plataforma, RS, publica un parche para solucionar algún problema, olvidándose completamente de que lo mismo sucedió hace años con el lanzamiento de MSTS.
Estoy convencido de que el futuro de la simulación ferroviaria está en "algo" que no es MSTS; no sé si será RS, Open BVE o cualquier otro simulador que pueda aparecer en el mercado. Pero mientras esto sucede, no hay que desahuciar completamente a ningún otro, tenga los fallos que tenga.
Mantener MSTS vivo no es difícil; a la aparición del Vallarizasoria le ha seguido el Gijón-Oviedo y pronto Despeñaperros; seguramente aparecerán otras rutas dentro de unos meses. Pero esto sucede, no porque MSTS sea la mejor plataforma de simulación, sino porque hacer una ruta cuesta años de sudores y esfuerzos, y estas rutas que están apareciendo llevan "cociéndose" desde hace mucho tiempo y tampoco era cuestión de abandonarlas, claro. Habrá que ver si dentro de unos meses, o uno o dos años, se siguen publicando rutas y material para MSTS, o si los creadores se han decantado por otra plataforma que, seguramente, por lógica natural, será mucho más moderna y contará con herramientas mejores.
Por último, sería de agradecer que se evitasen los fundamentalismos en este tipo de debates. Claro que algunos no lo pueden evitar, porque parece que sólo están en los foros para llevar la contraria y "marear la perdiz". Hablar del futuro de la simulación no significa "deslealtad" o "infidelidad" a uno ú otro simulador; hablar del futuro de la simulación significa, sencillamente, éso: hablar del futuro, de lo que está por venir. Pero sin renegar del pasado, claro. Y sin fundamentalismos, que no llevan a ningún lugar, aparte de generar tensión y crear descalificaciones personales absurdas, que tampoco sirven para que los simuladores se desarrollen con más rapidez.
Si me permitís un símil de "abuelo Cebolleta", hace bastantes años, después de la muerte de Franco (muchos de los foreros aún no habiais nacido), se generaron en el país varias corrientes para regresar a un Estado democrático. Las más fuertes eran una que defendía la "transición" y otra, que defendía la "ruptura". Y la diferencia entre una y otra, nos la explicaba nuestro profesor de política de la siguiente manera: Hay que trasladar un piano de un lado a otro de un precipicio; el único camino posible es un puente muy estrecho, sin protección y por el que cabe justo el piano. "Transición" significa en este caso, que entre todos vayamos empujando el piano, poco a poco, a través de este puente, para llevarlo al otro lado del precipicio. "Ruptura" significa tirar el piano por el precipicio, cruzar el puente y hacer un piano nuevo al otro lado.
No creo que nuestra tesitura sea tan drástica; pero si vamos hacia una "transición" está claro que hay que tener paciencia, porque es cuestión de tiempo. Y, claro, se requiere que todos arrimemos el hombro, no sólo unos cuantos. Y esto me lleva, indiscutiblemente, a las palabras de Pere en las Jornadas...