Renfe ha recibido diez unidades del fabricante alemán y espera recibir los seis restantes en lo que queda de año.
CARLOS VILLANOVA. Zaragoza | El Velaro, el tren de alta velocidad fabricado por la multinacional Siemens, que en España tendrá la denominación técnica S-103 (en Alemania es el ICE 3), está cubriendo con éxito las pruebas de homologación, que se realizan en tramo entre Guadalajara y Calatayud del corredor Madrid-Zaragoza-Lérida.
La espectacular y aerodinámica silueta de los trenes de Siemens se puede ver por esa parte de la línea AVE desde hace cuatro meses, cuando llegaron a la misma tras cubrir un periodo de pruebas iniciales en el tramo castellanomanchego del corredor de alta velocidad Madrid-Sevilla.
Como es habitual en este tipo de pruebas, las unidades con las que se trabaja en vía están siendo pilotadas y probadas tanto por los técnicos de la compañía fabricante como por operarios del departamento de Alta Velocidad de Renfe.
De momento, y siguiendo las especificaciones técnicas obligatorias, los análisis prácticos se centran en el comportamiento de los distintos elementos del convoy, como por ejemplo, los frenos o el pantógrafo, en determinadas situaciones. Como no se precisa demasiado terreno para esas maniobras, los trenes, aunque tienen a su disposición el tramo entero de Guadalajara a Calatayud, regresan en ocasiones a los talleres de Madrid sin alcanzar la capital bilbilitana.
La velocidad todavía no es un elemento importante en este periodo de homologación, aunque sí lo será en una fase próxima. Al igual que ocurrió con las pruebas del AVE de Talgo-Bombardier (el llamado "pato"), las unidades tendrán que superar en un 10% la velocidad máxima para la que están diseñados. Los AVE de Talgo alcanzaron en esa verificación los 365 kilómetros por hora, ya que su punta de aceleración comercial es de 330. En el caso de los Siemens , que están diseñados para llegar a los 350 km/h como tope, se tendrá que circular en pruebas hasta, por lo menos, 385 kilómetros por hora.
Dieciséis unidades
Siemens ya ha dado a Renfe diez unidades de las dieciséis que tenía comprometidas por un precio de 401 millones de euros. Las seis restantes irán siendo entregadas a la compañía española en lo que queda de año, tal y como fue acordado en el último calendario suscrito por las dos empresas para el suministro de estos trenes, que fijó la entrega de cinco unidades en 2005 y de las otras once en 2006. Con este acuerdo, el fabricante alemán superó las dificultades que encontró para cumplir los plazos inicialmente establecidos, que debían haber comenzado en octubre de 2003.
Renfe acordó en marzo de 2001 adjudicar de forma equitativa a Siemens y a Talgo-Bombardier el suministro de 32 trenes de alta velocidad para explotar el AVE Madrid-Barcelona, por un importe global de 740,36 millones de euros. Fue el denominado contrato ferroviario del siglo.
Según ese contrato, los fabricantes debían entregar la primera unidad del pedido en octubre de 2003 y, posteriormente, presentar a Renfe un nuevo convoy cada dos meses, pero Siemens no fue capaz de cumplirlo, por lo que Renfe le impuso una penalización de 11,1 millones de euros en julio de 2004. A pesar de ello, se abrió una negociación con la empresa alemana en la que se pudo fijar el actual calendario de entrega de las unidades y, además, se alcanzó el compromiso de que fueran construidos en los talleres de Renfe de Valladolid.
El más rápido
El S-103, cuyo diseño se basa en el del ICE 3 pero con innovaciones que aumentan sus prestaciones, equipamiento y comodidad para el pasajero, es el tren comercial sobre raíles más rápido del mundo. Su punta de velocidad le permitirá (cuando el sistema de gestión de tráfico ERTMS esté operativo en el nivel dos, imprescindible para circular a más de 300 kilómetros por hora) recorrer los 625 kilómetros entre Madrid y Barcelona en menos de dos horas y media.
La gran novedad tecnológica del Velaro es la tracción distribuida a lo largo del tren, en el que la mitad de los ejes están motorizados. Por ese motivo, los S-103 no llevan ni locomotoras ni cabezas tractoras, sólo cabinas de conducción en ambos extremos. La tracción distribuida (similar al sistema 4x4 en los coches) evita que la potencia requerida para ir a 350 km/h produzca un fuerte desgaste de las vias.
Salu2