Hola,
Estanislao, resulta agradable observar la "resaca" que se trae de vuelta a casa después de unas jornadas. Los que nos quedamos en casa hemos tenido por primera vez una especie de parche terapeútico en formato digital que nos ha calmado en cierta manera la sana envidia que os teníamos, pero claro, llegar a casa con un cd lleno de novedades aunque sean betas es un privilegio que sólo pueden disfrutar los asistentes.
Como muy bien dijo Javierfl, lo del on-line está muy bien pero lo suyo es estar ahí todos los días, y si no estamos pues nos jodemos. Las jornadas las hemos oido como mínimo, y también hemos tenido imágenes, gracias al esfuerzo del cordobés Aranda, pero nos hemos perdido el pasilleo, la comida (con flamenquines
), las visitas, que este año las encontraba muy interesantes para mí, en fin, que nos hemos consolado porque hemos querido y, en definitiva, porque no nos quedaba más remedio.
Y es que como estar ahí no nay nada mejor. A ver el año que viene...
Un saludo
Josep Maria