Victor escribió:Pues con todo mi respeto no has publicado más que carnaza para todos aquellos tiburones que desean el mal a RENFE.
Si en algo se debe atacar a RENFE, que más que ataque yo diría crítica, sería en ciertas desigualdades que se dan en materia de seguridad, porque ni siquiera la temática de gestión ferroviaria está al alcance de cualquiera de nosotros.
RENFE ha hecho una apuesta, tanto de imagen como de política, es la que hay y es la que debemos aceptar, porque hoy por hoy todavía no tenemos la distancia temporal para saber cuál es el resultado de dichas decisiones.
Yo quiero confiar en que las decisiones se han tomado con vistas a obtener resultados a largo plazo, que sean tanto económica como socialmente rentables.
Y en cuanto a lo de la imagen... bueno, el cerebro humano tiene una elevada capacidad asociativa, con lo que uno acaba encontrando los parecidos más inverosímiles, siempre subjetivos, por otra parte, si a esta capacidad asociativa se le añade la saña que se le tiene a RENFE, pues el post está servido...
Repito: sin acritud hacia nadie pero con el deseo de ver post más fructíferos.
Saludos.
Yo también deseo post más fructíferos, porque me estoy aburriendo de ver en todos los foros la misma discusión sobre los colores corporativos de Renfe Operadora. Ahora bien:
Hemos de tomar las opiniones de cada uno como lo que son, y respetar los gustos en cuanto a la estética del material ferroviario.
Lo peor es que es tremendamente difícil desprenderse de esa coraza anti-renfe que la antigua compañía SE HABÍA GANADO A PULSO y que la actual operadora no se está esforzando por vencer.
El marketing por encima de la gestión coherente, la palabrería vacía y grandilocuente, la incapacidad de gestión y la errática toma de decisiones a la que se añade el haber adoptado una imagen de empresa con un color de dificilísima aplicación, que le queda, como poco, hortera al material rodante, la sensación de que nos toman el pelo y que ni ellos se creen lo que nos dicen, etc., etc., etc., es lo que nos provoca un rechazo absoluto. Yo estoy en ese bando, si se le puede llamar así. En los años que hace desde que conozco un poco el ferrocarril nunca se me había acentuado esa sensación tanto como ahora.
Supongo que por algo será porque cuanto más leo peor opinión tengo de renfe operadora.
Espero que, salvo que lo que quieran es malvender su negocio, enderecen la dirección de su gestión, en material, tarifas, mejora de servicios e imagen, que no deben saber lo que es eso.
Un saludo y felices fiestas a todos.